La pala de padel, ¿con o sin protector?

La pala de padel, ¿con o sin protector?

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En un post anterior, la importancia del overgrip, os hablábamos sobre los diferentes usos que tenían estos y cómo afectaban al comportamiento de la pala. Pues ahora vamos a ver los usos del protector para el marco de la pala y cómo afecta a esta.

¿Para qué sirve el protector?

Cuando compramos una pala nueva lo último que queremos es que en el primer partido que la usemos, al ir a por una de esas bolas que van pegadas a la pared, al meter la pala nos llevemos un rascón. Da mucha rabia y esto hace que en los primeros partidos en los que estrenamos pala juguemos sin arriesgar demasiado no vaya a ser que la rasquemos en un de esas bolas comprometidas.

Hay gente a la que estas cosas le da igual, pero si eres de los que le gusta conservar la pala como el primer día quizás te interese ponerle un protector.

Al poner el protector al marco evitamos esos roces con la pared o contra la moqueta. Tampoco pensemos que si le damos un buen golpe la pala no se vaya a romper, eso tenedlo claro porque el protector es algo más estético que útil.

Tipos de protectores

Últimamente hay muchas marcas que ya incorporan protectores en sus palas. Varlion por ejemplo le pone unos muy resistentes pero usa tornillos para sujetarlo a la pala, esto no es muy recomendable ya que no suele pasar pero algunas veces los tornillos hacen que se pueda rajar por el marco.

Adidas también comenzó poniéndole protectores con tornillos y afortunadamente terminó cambiándolos por unos de plástico pegados al marco. Estéticamente quedan mejor y evitan posibles roturas de pala por culpa de los tornillos.

Otras marcas como Fakun o Akkeron llevan protectores de fábrica y después de probarlos un tiempo podemos decir que son bastante resistentes.

Luego están los protectores adhesivos para palas que no los traen de fábrica. Este tipo de protectores son menos resistentes, aguantan roces como los otros pero se rompen mucho antes y el problema viene cuando lo queramos cambiar por otro. Al intentar quitarlo, como llevan pegamento, nos llevaremos parte de la pintura de la pala. Así que ya veis, evitamos roces en la pala pero si lo cambias te llevas la pintura, ¡vaya negocio!

También tenemos los protectores de vinilo de carbono. Son más resistentes que los adhesivos y además al quitarlos no nos llevaremos la pintura del marco. En caso de decidir ponerle un protector a la pala, estos no son una mala elección.

Img post protector pala

¿Cómo afecta el protector a la pala?

En lo primero que afectan como ya hemos dicho es que si por ejemplo usamos un protector adhesivo y lo queremos quitar, nos llevaremos parte de la pintura del marco.

Pero en lo que más afecta el uso del protector es en el balance. Los protectores pesan entorno a los 8 gramos y aunque parezca una tontería, añadir este peso en el marco hace que le subamos el balance a la pala.

El subirle el balance a una pala a veces es negativo. Si la pala ya de por si es cabezona (tiene el balance muy alto) al ponerle el protector, el balance será muy alto y puede llegar el punto en el que la pala nos sea difícil de manejar.

Por contra, hay gente que le gusta las palas con un balance más alto y que le ponen un protector para que sea más fácil “pegar” con la pala. Un balance más alto es mucho mejor para jugadores pegadores. A la hora de hacer un smash, ayuda que el balance sea alto para poder pegarle bien a la bola.

Conclusión

Si no queréis que suba el balance de la pala pero preferís ponerle protector porque no os gusta que esta se roce contra la pared, podéis compensar el balance poniéndole más peso al puño. Lo más fácil es ponerle más overgrips, pero cuidado porque así lo que haréis es subir el peso de la pala y puede que no sea tan manejable como antes. Lo mejor es que si le vais a poner protector, y no lo lleva de fábrica, es comprar la pala en un peso inferior del que teníais pensado.

A nivel personal hace poco probé una Vibor-a Yarara Edición 2014 sin protector y he de decir que me encantó. Decidí quedármela y como no me hacía mucha gracia que se rascase le puse un protector. Para los que no lo sepáis, esta pala es muy cabezona y es conveniente comprarla con un peso no superior a los 365 gramos, ya que si no puede dar problemas de codo. Pues bien, al ponerle el protector subió el balance y cuesta un poco manejarla, no hasta el punto de hacerse insoportable, pero  se nota.

Ya veis, sólo 8 gramos que pesa un protector y todo lo que da de sí.

4 Comentarios

  1. David, totalmente cierto lo que comentas de que un protector hace que varié las prestaciones de la pala, en cuanto a balance.
    Aunque da mucho dolor “de corazón” ver como nos gastamos en alguna pala sus 300 euros, incluso más, y que al apurar un poco con la pared nos llevamos un buen roce, si no más.
    Yo siempre soy partidario de ponerle protector a una pala, aunque hay protectores más ligeros.
    Las marcas deberían de mirar ese aspecto para intentar buscar soluciones que protejan nuestra pala sin modificar mucho las prestaciones de la misma.

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