Otra vez la lluvia hizo acto de presencia en un torneo de World Padel Tour, algo recurrente cada vez que hay un torneo al aire libre.
¿Vale la pena realmente disputar hoy en día un torneo al aire libre? Un deporte que en cuanto llueve se para, ¿no sería mejor disputar todos los torneos indoor?
Que sí, que en un torneo al aire libre hay más sorpresas en forma de resultados, puedes instalar una pista en un escenario precioso y disfrutar de las vistas y del buen tiempo y no estar encerrado en un pabellón pero, ¿eso compensa?
¿Compensa tener que estar pendiente del tiempo para saber si se va a poder jugar o no? Recordemos casos como los últimos años de los torneos de Barcelona con la que se lió con tanto parón y tanto retraso, o el de Andorra hace algo menos de un año, cuando la final se tuvo que disputar un lunes y sólo la pudieron ver los allí presentes.
Puedes pensar “son casos aislados”, o decir “ya, pero en outdoor se disfruta más”. A nivel amateur no lo voy a discutir. A mi me gustaba jugar al aire libre, sobretodo en verano, pero cuando ya tienes que cancelar el partido dos o tres veces por lluvia… al final yo me pasé a indoor y así tengo una preocupación menos.
Como digo, a nivel amateur es una cosa, el indoor y outdoor tienen pros y contras, pero a nivel profesional la cosa cambia.
Hay demasiados factores que influyen como para estar pendientes del tiempo que haga. El primero los jugadores, si queremos que den espectáculo debemos ponerles las mejores condiciones posibles para rindan mejor. No puedes tener a los jugadores esperando que si ahora juego que si ahora no, que si ahora llueve… y en este caso la lluvia no es lo único que afecta. Las altas temperaturas que hemos vivido en algunos torneos outdoor en verano han dado más de un susto a algún jugador.
Los espectadores también se ven afectados. Tú pagas una entrada por ver el mejor pádel del mundo, no por las vistas. El espectáculo está en la pista, da igual lo feo que sea el pabellón, no has ido a ver su arquitectura.
Si el torneo es indoor sabes que como mucho se va a alargar la jornada por la duración de los partidos. En un torneo outdoor “te la juegas”, y eso siempre puede hacer que haya gente que se eche atrás o no pueda aprovechar sus entradas por culpa de un aplazamiento por la lluvia. Un pabellón no será bonito, pero unas gradas medio vacías tampoco lo son.
Que sí, que si es outdoor ya sabes que esas cosas pueden pasar pero, teniendo en cuenta que se pueden evitar, ¿por qué arriesgarse a que pasen?
Ayer afortunadamente la lluvia dio un respiro y se pudieron finalizar las finales, pero con un retraso de 4 horas. Como consecuencia, todos aquellos que quisieran ver las finales por GOL se quedaron con las ganas.
Ese es otro problema. En GOL hacen dos semifinales y las finales. Es tu apuesta para que el circuito World Padel Tour y el pádel se expanda y cada vez lo vea más gente. Pero llueve, se retrasan las finales y en GOL luego hacen cualquier cosa menos el pádel.
Repito, el espectáculo es el pádel. Queda muy bonita la foto de poner una pista de pádel en la plaza del Ayuntamiento o con la fachada de una catedral de fondo, pero para una exhibición, no para un torneo donde los jugadores se juegan el pan.
No puedes tener durante horas a los jugadores y espectadores sin saber qué va a pasar y quedarte sin tu franja en la televisión. Por muy bien que reaccionara la organización una vez apareció la lluvia. No se puede vivir del “es algo que podía pasar”. Si se puede jugar en pabellón, aunque sea verano, mucho mejor.
Casualmente hoy arrancaba el Madrid Challenger, cuya sede es el CD Somontes, club con pistas outdoor. ¿Qué ha pasado? Pues que ha llovido y los partidos de toda la jornada se han trasladado a Las Matillas. Un 10 para la organización por su rápida reacción y resolución del problema, eso que vaya por delante.
¿Un problema que se podría haber evitado? Lo mismo no. Puede que no hubiese otro club disponible para organizar el torneo. Es posible. Igual que es posible que algunas sedes que se ofrezcan para albergar una prueba sólo haya la opción de pista central outdoor porque no haya pabellones acondicionados para acoger una prueba así, lo cual habría que hacérselo mirar.
Podríamos compararlo con el tenis, pero teniendo en cuenta que en el tenis hay varios tipos de superficies es un poco absurdo. Además, cada vez hay más pistas que antes eran al aire libre que buscan techar las pistas para evitar los problemas que ocasiona la lluvia.
Un claro ejemplo de buena solución fue el de Barcelona. Después de unos años donde la lluvia había hecho acto de presencia, el torneo se trasladó al Pabellón Olímpico de Badalona. Por cierto, este año volvió a llover durante el torneo. Vale que la imagen de la pista central en El Polo de Barcelona sea más bonita, el ambiente mola más… pero hay que ser prácticos y tratar de evitar estas situaciones.
No porque hace años se jugase en pistas de muro al aire libre hay que seguir jugando así. Los tiempos cambian y las condiciones para jugar al pádel mejoran. ¿Por qué no aprovecharlo en vez de crearse problemas?